San Visén, Albelda
En Albelda, antaño, la víspera de esta fiesta se realizaba una mezcla explosiva con maderas, piedras y un detonante. Aquello era «fe petá el castell», que en un momento inesperado provocaba un ruido atronador. Durante los días previos a esta fiesta se arreglaban los caminos, encargándose de dicha misión los «oficiales» (barberos, herreros, carpinteros…), por considerar que eran unos privilegiados, pues no manejaban el pico y la pala en todo el año. Por esa razón debían colaborar en estas fechas.
La Colegiata de Albelda está bajo la advocación de San Vicente, en cuyo honor se celebraban las fiestas de invierno. En uno de los días de la fiesta se sube a la ermita de San Sebastián, donde se cantan los gozos y se reparte el «pan caritat».
Desde hace ocho años la peña «El Magré» organiza la denominada «Festa del Tosino«. Uno de los días de fiesta se dedica a este festejo. Por la mañana hay desayuno con chocolate y pastas. A media mañana se ofrece el almuerzo compuesto por cerdo a la parrilla. Al mediodía la comida consiste en consomé y caldereta de cerdo. Se matan media docena de tocinos para invitar a los asistentes. Es la fiesta de la matacía por excelencia.